1-La transición directa Si bien con el cambio directo a la dieta natural cruda no suele haber ningún problema y es lo más simple y rápido, habrá que tener siempre en cuenta la salud y la edad del perro, los años que lleva comiendo alimentos procesados, y si se le ha alimentado con alimentos frescos con anterioridad. Para hacer la transición directamente deberemos optar por alimentos y proteínas de fácil digestión, y como siempre vigilar las cacas que serán nuestra guía en el proceso. Con Natuka siempre recomendamos empezar con los tacos de pollo o pavo para habituar al animal al hueso carnoso, y a partir de aquí empezar a introducir más ingredientes hasta completar los porcentajes de la dieta BARF. Autores como Ian Billinghurst dicen que puede ser de ayuda antes de la transición un día de ayuno, sobre todo con perros que se extrañan ante el nuevo alimento. De esta manera el perro detoxifica en cierta medida el organismo, y además tendrá hambre cuando le ofrezcamos su nueva comida. Como regla general al hacer el cambio radical a la dieta BARF, lo mejor es dividir la cantidad diaria de alimento en pequeñas tomas para enfrentar a nuestro perro a menos cantidad de alimento de cada vez. Esto es sobre todo importante en perros de razas grandes donde una toma sería mayor en peso. Si bien un perro adulto comería dos tomas diarias, al hacer este tipo de transición lo recomendable sería hacer 3 o 4 tomas diarias más pequeñas. * La transición directa puede no ser la forma más recomendable de pasar a BARF para perros mayores, perros con problemas digestivos o bien con el sistema inmune débil. Los perros que llevan muchos años comiendo piensos procesados, tienen el sistema digestivo muy debilitado y podrían no tolerar este cambio directo, provocándoles vómitos y diarrea. 2 – La transition progresiva. Es la forma más recomendable en perros mayores o con con problemas digestivos. Introduciríamos las primeras veces el alimento crudo en pequeñas cantidades o como premio, y buscando como siempre alimentos y proteínas de fácil digestión (te recomendamos los tacos de pavo de Natuka) Lo más adecuado es ofrecerle el alimento nuevo separado de las tomas de su comida principal, ósea si le das dos tomas (mañana y noche) al medio día podría ser un buen momento. Como siempre vigilamos las heces que serán nuestra guía en la transición. Si estas son normales podemos ir incrementando la cantidad durante varios días o incluso semanas, y si las cacas continúan solidas ya podríamos sustituir una toma de pienso por el nuevo alimento y hacer una dieta mixta durante un tiempo. Si ves que no se desestabiliza, ya podemos hacer la transición completa a la dieta BARF sin ningún problema. * Recuerda que no se deben mezclar nunca en la misma toma los alimentos frescos de la dieta BARF con el pienso, las digestiones son muy distintas en tiempo y podría provocar gases y problemas intestinales.